Durante el periodo conocido como el Romanticismo, que se puede enmarcar desde las obras de Kant hasta Hegel, existió una polémica entre Friedrich H. Jacobi (1743-1807) y Moses Mendelssonh (1729- 1796) sobre una confesión de G.E. Lessing (1729-1781) a Jacobi en 1789[1] sobre la influencia que tuvo Spinoza en su obra, este evento es conocido por la historiografía filosófica como la polémica del panteísmo. Hay que señalar que hablar de Spinoza era motivo de mal gusto entre los pensadores de ese tiempo.
Ahora es necesario preguntarse ¿no es acaso Hegel un pensador de mal gusto en el ámbito de la filosofía latinoamericana actual? Indudablemente, un lugar donde la filosofía marxista es autoridad es en la visión de la filosofía latinoamericana. En todas sus variaciones: marxistas-leninistas, estalinistas, trotskistas, maoístas, gramscianos, sanchez-vazquistas, althuserianos o cualquier otra secta que abundan en las licenciaturas de ciencias sociales y humanidades pero entre todas estas sectas existe un empeño innegable: nulificar a Hegel.
“Alguna ocasión lo intenté leer pero es bastante complicado”, me comento en una ocasión algún incauto de estas sectas, a lo que comenté incrédulo ¿y Marx es sencillo? La respuesta fue algo contundente, comenzaron las acusaciones de que era pequeñoburgués y estaba en contra de las causas justas, que atentaba contra la desigualdad en la sociedad y demás reclamaciones airadas, hasta de fascista me tachó el sujeto aquel.
Entonces creo que entender la sociedad bajo los supuestos marxistas es una análisis aún valido, lo que considero que se ha agotado es el discurso revolucionario. Por más que con escritos subversivos se pretenda incendiar el sistema político injusto, que en buena parte de los países en “vías de desarrollo” se hace pasar por democracia, no lograrán un cometido revolucionario como se pretende, sino que, para bien o para mal, las bondades del capitalismo siguen disolviendo la vivacidad de un discurso revolucionario. Entonces ¿qué hacer si el proletario no se quiere emancipar?
Desde los manuscritos económico-filosóficos Marx parte de señalar la afirmación falaz que “la economía política parte del hecho de la propiedad privada; no lo explica”[2] pero Marx al emplear su explicación, el materialismo histórico, no hace más que hacer una pequeña modificación a Hegel. Hegel parte de la explicación de la historia que da en un plano abstracto, el gran logro de Marx es pasar esto a la esfera de la economía política, en el que la conciencia, el yo, se enfrenta en una lucha a muerte para poder generar así la cultura pero no es algo que llegue a ser inmutable sino que lo que caracteriza a la humanidad es el constante devenir en el que se encuentra la humanidad, es decir que va llegar un momento en el que la misma emancipación del siervo, como lo llama Hegel, sea inevitable y acaba así con su amo[3].
Entones ¿Cuál es la finalidad de lo regresar a Hegel? Bueno el análisis hegeliano es algo que aún no ha sido agotado. La filosofía del derecho, la fenomenología o hasta la lógica aún tienen muchos elementos para entender las contradicciones en el capitalismo.
En Marx es algo que durante todo el siglo XX sufrió el auge de la evocación revolucionaria y debido a las críticas obtusas que hizo Engels a la filosofía de Hegel[4], en las que se burla o hace evidente su nulo entendimiento del idealismo absoluto, diciendo que el materialismo es crucial para el entendimiento del capitalismo, se ha eclipsado la magnitud de las herramientas conceptuales que nos puede brindar para el entendimiento y la Aufhebung [superación] de las situaciones actuales.
Alumno de la generación 2015 del Colegio de Estudios Latinoamericanos.
Líneas de investigación
Filosofía: en especial la recepción de la Filosofía alemana en Latinoamerica.
Sociología: los procesos civilizatorios a partir de la contraposición de Europa y América Latina.
Urbanismo: las configuraciones de las ciudades a partir de las influencias culturales en América Latina.
Notas
[1] http://plato.stanford.edu/entries/friedrich-jacobi/#4 [Consultado el 13 de marzo de 2015 a las 11:26]
[2] Karl Marx ([1844] 2012) “Apéndice I. Manuscritos económico-filosóficos de Karl Marx. Primer manuscrito. El trabajo enajenado” en Marx y su concepto del hombre de Erich Fromm, FCE: México, p. 103
[3] Vid “Autoconciencia” en Fenomenología del espíritu de GWF Hegel, FCE: México, pp. 107-139. Para entender el núcleo especifico de la afirmación ver “[2. La lucha de las autoconciencias contrapuestas]” pp. 115-116
[4] Friedrich Engels ([1892] 1978) “II” en Del socialismo utópico al socialismo científico, Publicaciones Cruz O.: México, pp.40-46